Unos cuantos mese después de su salida en consolas de sobremesa y PC, Street Fighter X Tekken llega por fin a Vita con unos cuantos añadidos extra. La unión de las dos sagas de lucha más importantes se pasa a lo portátil, si queréis saber qué tal, tenéis el análisis completo tras el salto.

Ya analicé en su día SFxT para 360, así que intentaré no repetirme demasiado, porque como podréis imaignar, es básicamente es mismo juego. No tiene el mismo nivel técnico y tiene algunos extras más, en poco más se diferencia.

Al ya de por sí grande plantel de luchadores con el que nos encontrábamos antes, se unen los cinco exclusivos de PS3 y los doce que llegaron más tarde como DLC, ahora aquí gratis, así como unos cuantos trajes adicionales.

Gracias a esto tenemos la versión más completa del juego, siendo esto lo mejor de todo. Ahora, también hay unas cuantas cosillas menos buenas de las que hay que hablar.

Al contrario que Marvel vs Capcom 3, que aguanta el tipo muy bien, Street Fighter X Tekken no es tan similar gráficamente a las versiones de sobremesa, queda bastante por debajo. Los modelos se ven peor, los escenarios son bastante más simples y el aspecto general no es ni de lejos el mismo.

También los tiempos de carga han aumentado y el online no va tan fino como debería. A veces va bien, pero en otras hay un pequeño lag, que aunque no destroza la partida completamente, sí es bastante molesto. En un juego así el lag tiene que ser mínimo porque hay que jugar rápido, y esto es algo bastante feo.

Esta versión tiene por cierto Cross Platform Play con PS3, por lo que podréis hacer combates entre PS3 y Vita. Como podréis imaginar, no es algo que haya podido comprobar jugando entre una PS3 y una Vita en la misma red, así que no os puedo contar que tal.

Este título se juega igual que siempre: parejas de dos pelean de uno en uno en un entorno horizontal, con algún combo entre los dos luchadores. Además sigue estando presente todo el tema de las gemas para modificar determinados atributos si se dan ciertas condiciones.

El problema viene cuando los controles que ofrece Vita no son suficientes. O sí lo son, pero no todo lo satisfactorios que se desearía. Todos los que hayáis jugado a la saga Street Fighter sabréis que tenemos tres puños, tres patadas y el resto son combinaciones entre ellos, medias lunas y demás. Bueno, pues ahí radica el problema.

Vita tiene cuatro botones frontales y dos gatillos superiores, con lo que todos los ataques quedan cubiertos. Lo que pasa es que esta disposición de botones es bastante incómoda y aquí no hay remedio para ello (como sí hay en consolas con un fightpad o un stick).

Esto se intenta solventar poniendo cuatro botones virtuales en la pantalla y dos más en el trackpad trasero. Pero es peor el remedio que la enfermedad, porque este sistema es aún más incómodo que el anterior. Además si no desactivamos los botones virtuales traseros, los pulsaremos muchas veces sin querer, simplemente con sujetar la Vita de una forma normal.

Además, olvidaos de jugar con los minúsculos sticks de la consola, porque son la cosa más imprecisa que ha existido nunca. Por suerte hay una cruceta, aunque no me termina de convencer demasiado, pero bueno.

Creo sinceramente que Street Fighter X Tekken llega demasiado tarde y lo que es peor, ofreciendo una experiencia inferior a la de consola, tanto gráfica como jugablemente. Además el online sufre de un poco de lag a veces.

De todos modos, si no habéis jugado la versión de sobremesa puede ser una opción en Vita, ya que es la versión más completa, dado que viene con todos los personajes sin tener que pagar DLCs.

7

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